un trazo firme



un trazo firme

«Tortajada es un trazo firme desde que vino al mundo en Toledo un invierno de 1969. Un trazo decidido que con catorce años quiso ingresar en la Escuela de Artes y Oficios Artísticos de Toledo, antigua Escuela de Industrias Artísticas. Quizá fue allí donde se colaron en su cartera algunas constantes temáticas en su creación, piezas útiles, repetición de motivos, estética industrial, búsqueda del «alma» en la máquina.

Pudo en esta época hacer su aparición el oficio, pero fue su etapa como Profesor en  Escuelas Taller la que marcó un método de trabajo siempre encaminado a la consecución de la calidad mediante la elaboración lenta y preciosista del proyecto. A diferencia de otros artistas, el hecho de formar parte de equipos multidisciplinares le habitúa al trabajo colaborativo y a sus beneficios, hábito que se va consolidando en su etapa como restaurador de bienes patrimoniales.

El contacto con otros profesionales, con otros puntos de vista, otras técnicas y otros materiales le abren un abanico infinito de posibilidades y el trazo firme y decidido se adentra por vericuetos. En el trayecto aparecen puertas y ventanas que se abren a paisajes nuevos o que definitivamente se cierran sobre la pieza concluida.

Si preguntas a Tortajada por materiales, todo lo moldeable tiene cabida y la plasticidad le lleva hasta el graffiti digital. Si preguntas a Tortajada por técnicas, cualquiera es válida si sirve para expresar su idea. Si preguntas a Tortajada por herramientas te lleva a su taller y te introduce en un laboratorio donde la gubia, el barro y el pincel conviven en extraña armonía con impresoras y escáneres 3D.»

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